La Piazza del Duomo es el corazón de Florencia. Tanto en lo religioso como en la propia vida de la ciudad.
A su alrededor se levantan tres de los principales monumentos de Florencia: la Catedral Santa Maria del Fiore, el Campanile de Giotto y el Battistero de San Giovanni, además de varios palacios y otros edificios históricos.
Este barrio estaba dentro de las murallas de la antigua ciudad romana: recientes excavaciones en la zona de la Plaza han descubierto restos de las antiguas termas romanas.
La zona se convirtió en el centro religioso de la ciudad cuando se construyeron el baptisterio y la catedral de Santa Reparata.
Ésta última acogió, con una ceremonia solemne, el cuerpo de San Zanobi, que estaba en la cercana Iglesia de San Lorenzo. Antiguamente, la plaza era mucho más pequeña: el Palacio Episcopal estaba justo al lado del Baptisterio.
En la plaza también encontraréis el Museo dell’Opera del Duomo, lugar donde se exponen, entre otras cosas, las esculturas originales que adornaban los edificios de la plaza.